Hoy voy a hablaros sobre la pérdida de grasa y el ayuno intermitente. Estoy segura que habéis oído hablar de este método y vengo a despejar ciertas dudas.
El ayuno intermitente no es más que la reducción del tiempo que destinas para hacer todas las comidas del día. Como por ejemplo, ayuno de 12h, 14h, 16h…(estos son los más comunes).
Por ejemplo, podemos hacer un ayuno de 12:12. Eso significa que se basará en 12 horas de ayuno y comer durante las 12h restantes. Este tipo de ayuno es el más fácil ya que sería cenar a las 21:00h y desayunar a las 9:00h. Solamente desayunas un poco más tarde de lo habitual.
Con el ayuno de 16:8, podemos empezar al mediodía, comiendo a las 13:30h por primera vez. Eso significa que la última comida acabará a las 21:30h y nos habremos saltado el desayuno.
Así pues, esas calorías que destinábamos por la mañana, se esfuman. Eso va a hacer que consumamos menos kcal a lo largo del día y ese déficit va a provocará la pérdida de peso.
Si os apetece iniciaros y aplicar el ayuno intermitente en tu vida, podéis hacerlo siempre y cuando os sea fácil y cómodo. Como empezar por el ayuno más fácil de 12:12. Os recomiendo que si no lo habéis hecho nunca, no no lo hagáis todos los días. Marcaos un par de días a la semana para probarlo y notar como os sentís. No es obligatorio hacerlo cada día. Debéis hacerlo los días que os sea más fácil aplicarlo (ya sea cada día o en días puntuales de la semana) siempre y cuando os apetezca y os sintáis cómodo/as.
Lo más importante es encontrar un balance que os suponga una estabilidad y un estilo de vida saludable, adaptado a vuestra situación y preferencias.
Pero, ¿el motivo por el que perdemos peso es el ayuno como tal?
Os tengo que decir que no. Que lo que nos hace perder peso es el mismo motivo de siempre y el único único que debemos tener en cuenta: el déficit calórico.
No hay manera más fácil de explicarlo que esta: si quemo 2000 kcal y como 2200, subo de peso; por muy saludable que sea toda la comida que ingiera. Y si como 1800, perderé peso; por muy malsanos que sean los alimentos que ingiero. La salud es otro tema, tan o más importante que el ayuno o el número de calorías diarias.
Entonces, ¿puede ayudarme el ayuno intermitente a bajar de peso?
Puede que sí, pero eso dependerá de ti y de lo fácil que te sea adherirte a este método.
Insisto, si te es fácil y cómodo, no te crea ansiedad el pasar tantas horas sin comer y encuentras que surge resultado, adelante. Pero en caso opuesto, no te desmotives ya que no es la base de la pérdida de peso, hay muchos recursos para ello, y la encontraremos.
Es una herramienta más en el mundo de la nutrición pero no la única para bajar de peso. Cada caso es único, individual y debe ser tratado personalmente.
Por último, me gustaría añadir que no estoy afirmando que el ayuno intermitente no tenga más utilidad que esa. Este método puede o no favorecer la pérdida de peso, pero tiene otros beneficios positivos para nuestro organismo de los que hablaremos otro día. ¡Gracias!